Cotton Candy

NO HAY TITULO.

lo deprimente ni siquiera debería escribirse, pero aquí estoy, botando todo lo venenoso de mi ser en este blog...
hace algunos días al tratar de escribir una tarjeta, de casualidad, volví a entrar en el blog, me cuesta admitirlo, pero llore, llore con todas las cosas deprimentes que escribí, lo que sentía y aun siento, todos esos sentimientos que prometí sacar de mi ser para poder vivir feliz, aunque sea un tiempo.
Aveces me sorprendo de mi misma, pero no de mi fuerza de voluntad, sino de mi capacidad de ocultar cosas, de que las personas me digan que soy alegre cuando en realidad sigo siendo la persona melancólica, triste y amargada que e sido siempre, que por muy bien que lo oculte, solo se que sigo siendo la misma persona que salio de la enseñanza básica sin amigos y sin razones para vivir, que sigo estando aquí ocupando espacio innecesariamente, que por mucho que me esfuerce, y por mucha ayuda que reciba de las personas que me rodean (aunque ellas no se den cuenta de lo valiosas que son para mi y que nunca llagaré a demostrarlo con palabras), al final, después de las risas, las lágrimas, los cortes, las peleas y el silencio, habrá un vacío, y en ese vacío estaré yo, sufriendo, sufriendo por todo el tiempo que decidí ocultar todo tras una sonrisa, y sufriendo por lo que me queda por vivir.


A pesar de todo, creo que mi sufrimiento es ínfimo en computación al de otras personas, se que no es consuelo, ni quiere decir que le deseo mal a otras personas, pero soy consciente de que soy de las personas que provocan una tormenta en un vaso de agua, que aunque me cueste admitirlo, no soy capaz de valerme por mi misma y eso me da alas para ser la persona que soy y lo seguire siendo hasta el fin de mis dias